jueves, 7 de septiembre de 2017

La ayuda humanitaria como arma: MSF y el apoyo a los yihadistas "rebeldes" en Siria

Ayudar a personas a sobrevivir catástrofes o guerras es el principal argumento de las ONGs para justificar su trabajo. Este objetivo, aparentemente noble, esconde intereses económicos y políticos [1], es completamente nefasto en la práctica para quienes se pretende ayudar [2], y además de tener un tufillo racista insoportable, es uno de los principales focos de corrupción en el llamado tercer mundo [3], dando lugar a la aparición de lo que puede denominarse mafia humanitaria [4]. En la práctica, la consecuencia de la llamada ayuda humanitaria es la aparición de relaciones de dependencia entre las víctimas de las catástrofes y quienes las pretenden ayudar. La prolongación del sufrimiento que da lugar a dicha dependencia es beneficiosa para las ONGs, dando un sentido a su existencia y garantizando su financiación (del 50% al 90% de las donaciones a ONGs se emplean en los gastos internos de dichas organizaciones); de esta forma, el sufrimiento de las personas es indispensable para la supervivencia de las ONGs, dando lugar a un distanciamiento hacia quienes pretenden ayudar, que a su vez provoca la aparición de abusos sistemáticos por parte de los "salvadores" [5].

Provocando una crisis humanitaria: el ejemplo de Homs

En Siria, los "rebeldes" respaldados por la OTAN se han dedicado desde el principio a destruir las infraestructuras gubernamentales; su objetivo era hundir el aparato estatal a través de un caos humanitario gigantesco, siguiendo la lógica de las llamadas Guerras de Cuarta Generación (4GW) [6]. Dentro de esa táctica la destrucción de las infraestructuras, las redes energéticas y de comunicaciones tienen una importancia mayor que los enfrentamientos directos con el estado, ya que si este es incapaz de cubrir -siquiera minimamente- las necesidades de sus ciudadanos, perderá su lealtad. También con este objetivo, los rebeldes han ocupado el casco viejo de las principales ciudades y llevado a cabo asesinatos selectivos, sembrando el terror y el caos.
El ex-Coronel de los EEUU James Steele, responsable de organizar escuadrones de la muerte en El Salvador en los 80 y en Irak tras la invasión de 2003
Lo ocurrido en la provincia de Homs, una provincia con dos millones de habitantes y con importantes minorías (cristianos, chiitas, etc), y cuya capital es una de las mayores ciudades de Siria, es un ejemplo de lo ocurrido en todo el país. A mediados de 2011, los "rebeldes" iniciaron una campaña de terror similar a las vividas en las peores épocas en Irak, que hoy se sabe fue provocada de manera consciente por las fuerzas de ocupación de los EEUU para impedir el surgimiento de una resistencia general contra la ocupación; según descubrieron recientemente la BBC y The Guardian, al mando de la operación estaba el ex-Coronel de los EEUU James Steele, antiguo responsable de organizar los escuadrones de la muerte en El Salvador, famosos por sus salvajadas [7]. En aquella época, el embajador de EEUU en Iraq era John Negroponte, antiguo embajador de EEUU en Honduras en 1981-85, donde se encargó de organizar los escuadrones de la muerte nicaragüenses (la Contra); Robert Ford, futuro embajador de Siria hasta la "revolución" de 2011, trabajó de 2004 a 2006 como "Political Officer" en la embajada de EEUU en Bagdad, mientras Negroponte supervisaba la creación de  los escuadrones de la muerte iraquíes [8].
La campaña de terror que desataron los rebeldes estaba perfectamente organizada, como puede comprobarse en lo sistemático de sus asesinatos en Homs a partir de septiembre de 2011: el día 25 asesinaron el doctor Hassan Eid, director de la unidad de cardiología del Hospital Nacional de Homs; el día 27 asesinaron a Nael al-Dakhil, decano de la facultad de químicas de la Universidad de Homs; el 29 asesinaron a Aws Abdel Karim Khalil, ingeniero en física nuclear y decano de la universidad de Homs; el 3 de octubre asesinaron a Mohammad al-Omar, profesor de historia en la Universidad de Homs, así como a Saria Hassoun, hijo de Ahmad Badreddin Hassoun, el gran muftí de Siria (la mayor autoridad de los musulmanes sunies sirios)...  [9]. Al mismo tiempo, los "rebeldes" ocupaban el casco histórico de la ciudad, llevando a cabo una limpieza étnica de las zonas habitadas por minorías no suníes; como pudo comprobar la ONU, sus salvajadas (limpieza étnica de cristianios y otras minorías, degollamientos públicos, etc) generaron una atmosfera de terror provocando la huida general de los 400.000 habitantes del centro de Homs (convertido en el Califato de Baba Amro) y de otras zonas de combates hacia la periferia, provocando una crisis humanitaria enorme; hoy día, el barrio de al-Waar ha pasado de 150.000 a 700.000 habitantes en poco tiempo [10].

El Doctor Hassan Eid, jefe de cardiología del Hospital de Homs, asesinado por los "rebeldes".

La ofensiva mediática de las ONGs en epoyo de los “rebeldes”

En medio de esta carnicería, los rebeldes pusieron especial énfasis para empeorar la situación de la población. A los ataques sistemáticos contra los trenes, la infraestructura energética y la red eléctrica [11] se unió la destrucción del sistema sanitario: en la provincia de Homs volaron por los aires uno de los mayores hospitales de Siria, en la ciudad de Qusayr, con enfermos y personal sanitario dentro, con la excusa de que también atendía a heridos del ejército [12]. No obstante, las ONGs nunca han criticado dichas salvajadas, pese a que son crimenes de guerra que violan la Convención de Ginebra, al estar claramente dirigidas a provocar el sufrimiento de la población: "ya no tenemos suficiente gas de calefacción para los meses de invierno. Ahora la situación va a empeorar" [13]. En lugar de ello, MSF publicó poco después un informe acusando al gobierno de utilizar el sistema sanitario para combatir la rebelión y sus partidarios entre la población (!), informe que no cumple los mínimos requisitos para ser considerado veraz: sus fuentes de información son anónimas (o de la oposición), y no intentó confirmarlas -o refutarlas- sobre el terreno [14].
Meses después, durante una ofensiva "rebelde", MSF y los medios de comunicación occidentales lanzaron una nueva campaña contra el gobierno, acusándole de torturar "rebeldes" en los hospitales, difundiéndo un video sobre supuestas torturas a los detenidos en el hospital militar de Homs [15]. Nada más emitirse, la Alta Comisaria de la ONU para Derechos Humanos, Navi Pillai, lo utilizó para defender un informe de su departamento (que Rusia denunció por partidista [16]) que acusaba al gobierno sirio de la mayoría de las violaciones de los derechos humanos. Pillai ha trabajado previamente en los tribunales internacionales creados para juzgar el genocidio de Ruanda y los crimenes de guerra en Yugoslavia, tribunales creados por occidente para encarcelar a sus oponentes; además, un forense del Tribunal Penal Internacional defiendió la veracidad del video, pero no tardó en comprobarse que era una burda falsificación [17].
Video de los "rebeldes" mostrando la voladura del hospital de Qusayr,con enfermos y personal sanitario dentro.
Pero más grave que las acusaciones de MSF y la Cruz Roja han sido sus omisiones, o verdades a medias: los rebeldes nunca son culpables de nada; de hecho, solo nos hemos enterado de las gravísimas violaciones de los derechos humanos (canibalismo incluido) por los rebeldes gracias a su exibicionismo y a YouTube, ya que las ONGs nunca han levantado la voz para denunciarles. Y es lógico que así sea, ya que si se supiese lo estrecho que son los lazos de las ONGs con los fundamentalistas en Siria se desataría una (merecida) ola de indignación. Un ejemplo es su colaboración en el frente: MSF defiende, orgullosa, el tener cinco hospitales en territorio rebelde, camuflados para que el gobierno no los localice [18], lo que no les ha impedido protestar cuando uno de esos hospitales ha sido alcanzado en un bombardeo [19]. Lo que MSF no dice es que esos hospitales no son para la población civil, sino que están levantados cerca del frente, para los heridos en combate [20]; de hecho, los civiles tienen prohibido usarlos [21]. Así, MSF colabora de manera indirecta pero fundamental en el esfuerzo de guerra y la logística de los ""rebeldes", igual que Israel, que además de apoyar militarmente a los "rebeldes" también ha levantado un hospital para ellos en los Altos del Golán [22], y ha declarado preferir una Siria fundamentalista [23]. Es necesario destacar que MSF normalmente actua con el consentimiento de los gobiernos, con dos o tres excepciones a lo largo de su historia; "casualmente", uno de esos casos fue Afganistán, donde MSF junto a Bernard-Henry Levy y otros intelectuales de salón apoyaron a guerrillas fundamentalistas creadas y financiadas por occidente, curas y terratenientes, en contra de un gobierno secular.
El hospital de campaña levantado por el ejército de Israel para curar a los fundamentalistas.

Las ONGs, parte del aparato propagandístico de los “rebeldes”

Más grave aún que el difundir mentiras es la participación activa de las ONGs en el suministro de los rebeldes. El control de los suministros es esencial para ganarse el apoyo de la población, por ello destruyen ellos las redes de suministro del gobierno. Según testimonios recogidos por la periodista Silvia Cattori en la provincia de Homs, la Cruz Roja ha entregado suministros a los islamistas que ocuparon Qusayr, y no a los civiles [24]. En Aleppo, cuando el Frente Al-Nusrah (afiliado a Al Qaeda, calificado por EEUU de organización terrorista y con un amplio historial de crimenes contra los civiles) logró hacerse en noviembre de 2012 con el control de los depósitos de harina gubernamentales, provocó un alza inmediata de los precios, lo se convirtió en un motivo de protesta contra ellos, que fueron acusados de corrupción [25]. La situación se logró superar gracias a la intervención de EEUU, que de manera discreta se encargó de suministrar harina a Al-Nusrah a través de USAID, según ha informado el Washington Post [26]; de esta forma, el gobierno de los EEUU colabora con una organización que considera terrorista y que, además, afirma formar parte de Al-Qaeda...

No solo EE.UU. ha decidido apoyar a los ´"rebeldes". MSF ha llegado incluso a pedir publicamente que se ignore el veto de Rusia en la ONU y se lance una intervención "humanitaria". El Dr. Berés, uno de los fundadores de MSF, pide "intervenir sin la luz verde de la ONU... o al menos, habría que armar seriamente (a los rebeldes)". Lo interesante de estas declaraciones es que Berét conoce bien a los rebeldes: meses más tarde, tras volver de Aleppo, Berés afirmó que la inmensa mayoría de los combatientes eran islamistas fundamentalistas, siendo extranjeros la mayor parte de ellos: "algunos eran franceses y completamente fanáticos sobre el futuro"... [27]. Esto no ha impedido que, a día de hoy, Berés (y MSF) sigan apoyando a los fundamentalistas...
Al-Nusra (Al-Qaeda) repartiendo pan en Aleppo, gracias a la ayuda de la USAID norteamericana.

NOTAS

  POLMAN, Linda (2008): "Die Mitleidsindustrie. Hinter den Kulissen internationaler Hilfsorganisationen"; HANCOCK, Graham (1989): "Lords of Poverty. The power, Prestige, and Corruption of the International Aid Business". La crítica hacia los paises occidentales no es tolerada, dando lugar incluso a la censura previa de publicaciones de las organizaciones humanitarias de la ONU, como el UNHCR: "En 1988... el Alto Comisionado para Refugiados, Jean-Pierre Hocke, ordenó la destrucción de todos los ejemplares de un número de la revista mensual de la agencia, con un coste de 50.000 dólares. Esto se hizo porque el número en cuestión era profundamente crítico con los procedimientos de asilo para refugiados de Alemania occidental y con las condiciones de vida en tres centros de recepción de refugiados en la república federal. El gobierno de Alemania occidental proporciona el 10% del presupuesto anual de UNHCR y por ello el comisionado consideraba que debía estar por encima de cualquier critica." (Hancock, p.103); The Guardian, 08.01.1988. 
 2  Ruanda es un perfecto ejemplo del papel nefasto de las ONGs: antes del genocidio que tuvo lugar en 1994, las ONGs apoyaron el sistema del apartheid contra los llamados tutsis, organizado con el apoyo de Francia y la Iglesia Católica, a cambio de participar en el gigantesco presupuesto para ayuda al desarrollo del país, nada menos que un 11% del PNB; UVIN, Peter (1998): "Aiding Violence: The Development Enterprise in Rwanda". Tras el genocidio ruandés, las mismas ONGs apoyaron la creación de gigantescos campos de refugiados en el antiguo Zaire (como el de Goma), oponiendose firmemente a su disolución, a pesar de que dichos campos estaban controlados por los responsables del genocidio, que utilizaban como rehenes a los refugiados de dichos campos; los campos servían además como bases para una guerrilla de corte genocida, que intentaba reconquistar el país. Cuando finalmente el ejército ruandés intervino militarmente, poniendo en marcha el regreso de los ruandeses a su país y desmantelando el aparato militar de los genocidas, las ONGs acusaron al ejército ruandés... de genocidio; GOUREVITCH, Philip (1998): "We wish to inform you that we will be killed with our families"; GOUTEUX, Jean-Paul (2006): "Apología de la balsfemia. El peligro de creer"; Amor y Rabia, Nros. 2 y 18; Sobre las ONGs y los campos de refugiados: "Rapport de l'Organisation de l'unité africaine (OUA) sur le génocide au Rwanda", Capítulo 19.
  El Mundo (05.03.2006), suplemento Crónica Nro. 540: "Permitanme que acuse a varias ONG".
  Este tema será tratado de manera monográfica en un próximo número de Amor y Rabia.
  Valga como muestra el caso de la ONU y sus organizaciones, como ACNUR: FRATTINI, Eric (2011): "ONU. Historia de una corrupción". Un análisis del proceso de alienación puede encontrarse en MARGOLIS, Eric (17.03.2012): "All colonial wars are alike".
  WIKIPEDIA, "Fourth Generation Warfare" (http://en.wikipedia.org/wiki/fourth_generation_warfare).
  KELLY, Kieran (18.03.2013): "The Guardian's Death Squad Documentary May Shock and Disturb, But the is Far Worse" (http://www.brussellstribunal.org/article_view.asp?id=841). Inglaterra también hizo lo mismo en su zona: Michael Keefer/Global Research (25.09.2005): "Were British Special Forces Planting Bombs in Basra?" (http://www.globalresearch.ca/were-british-special-forces-planting-bombs-in-basra/994).
  Wayne Madsen (09.2011): "U.S. Ambassador to Syria in charge of recruiting Arab/Muslim death squads" (http://www.infowars.com/u-s-ambassador-to-syria-in-charge-of-recruiting-arabmuslim-death-sqads/).  
  "Quizás la faceta más dramática de la lucha es una serie de asesinatos la pasada semana que ha acabado con la vida de cerca de una docena de profesores, doctores y delatores en un paroxismo de violencia que imita las vendettas sectarias que continuan dominando Iraq. A diferencia de los primeros días del alzamiento... el miedo está empezando a cambiar de dirección, mientras los insurgentes matan partidarios del gobierno y delatores... Uno de los asesinados fué el Dr. Hassan Eid, jefe de la cirugía torácica en el Hospital Nacional... fue disparado en la cabeza en frente de su casa cuando iba a trabajar" New York Times (11.10.2011): "Key Syrian City Takes On the Tone of a Civil War".
 10  "La población vive en una atmósfera envenenada por miedo de un tipo que no había visto desde bagdad en los peores momentos de la guerra civil sectaria de 2006-7". Patrick Coburn/The Independent (28.06.2013): "Return to Homs. An Atmosphere Poisoned By Fear". Publico (07.03.2012): "La responsable de la ONU se encuentra un barrio de Homs totalmente vacio".
 11  A mediados de 2011, provocaron el descarrilamiento de trenes de pasajeros en las proximidades de Homs [Al Arabiya (24.07.2011): "Syrian Train Derailed"] y destruyeron repetidamente el gaseoducto que atraviesa la ciudad ["Es el cuarto ataque contra el oleoducto de Homs desde el inicio del levantamiento...", Der Spiegel (03.01.2012): "Gas-Pipeline in der Provinz Homs explotiert"], por poner tan sólo dos ejemplos. También han sembrado el terror entre los empleados de la infraestructura civil mediante masacres, como la ocurrida el 7 de abril de 2012 contra 16 trabajadores de la compañia eléctrica siria, en Jandar, a 30 kilómetros al sur de Homs; incluso en OSDH, favorable a los "rebeldes" les ha imputado la autoría en dicha masacre (Algérie1 (07.08.2012): "16 Syriens massacrés par les rebelles islamistes à Homs".
 13  France24 (08.12.2012): "Pipeline explosion in Homs: 'This is collective punishment' ". Naturalmente, la televisión francesa acusa al gobierno de los atentados (!).
 14  Amnesty International (25.10.2011): "Health Crisis: Syrian Government Targets the Wounded and Health Workers". Franklin Lamb/Al-Manar (29.10.2011): "Confusing Syria with Libya? Fact checking AI’s 'hospitals investigation' ". Ver Nota 64, p.19.
 17  Marinella Correggia/Global Research (14.03.2012): "'The Most damning Video on Syria' is a Fake". Wikipedia, "Navi Pillay".
 18  Deutsche Welle (06.06.2013): "Targeted attacks on medical services in Syria".
 19  SKY News (27.05.2013): "Syria: British Doctor Killed In Hospital Attack".
 20  La importancia de MSF para los rebeldes es enorme: desde Junio de 2012 a Junio de 2013 han tratado  a 34.700 pacientes. MSF (06.2013): "Syrian Crisis Appeal".
 22  Haaretz (28.03.2013): "Israel operating field hospital along border with Syria"; una granada en el bolsillo de un paciente provocó un desalojo: The Times of Israel (06.06.2013): "Grenade found in pocket of Syrian hospitalized in Israel".
 24  "el 9 de Mayo, vi un convoy de la Cruz Roja... pregunté al conductor del convoy si necesitaban un intérprete... estaba encantado cuando me enteré de que ese convoy... iban a entregar suministros a los residentes de Qusair. Hoy a través de alguien que venía de Qusair me he enterado de que, para mi sorpresa, el convoy de la Cruz Roja ha descargado sus suministros directamente donde esas bandas nos atacan con sus armas" Silvia Cattori (09.02.2012): "Testimonio de un ciudadano sirio desde la ciudad de Homs"
 25  New York Times (18.12.2012): "Rubble and Despair of War Redefine Syria Jewel"; Phillip Smyth/Middle East Voices (23.01.2013): "Syria’s Hunger Games"; Justin Vela/The National (13.02.2013): "Syria's Al Qaeda-linked militants win hearts by providing food". Curiosamente, desde el verano la prensa occidental acusaba al gobierno de bombardear panaderías [ver pag. 10], siguiendo el modelo libio de acusar al gobierno de los crimenes "rebeldes". Vease Human Rights Watch (30.08.2012): "Syria: Government Attacking Bread Lines".
 26  The Washington Post (14.04.2013): "U.S. feeds Syrians, but secretly".